sábado, 9 de abril de 2022

La esclavitud en Sevilla [una historia silenciada]

Cartel de la película "Negros" realizado por Francisco Vaquero


El documental está basado en la rigurosa investigación del emérito catedrático de Antropología Isidoro Moreno, fundador de la disciplina en la Universidad de Sevilla en 1986, la primera cátedra de Antropología que se crea en Andalucía.

Aprovecho el espacio que me brinda el blog de mis culpas para felicitar a todo el equipo de la película "Los Negros" y a Isidoro Moreno como investigador, que han hecho posible este didáctico documental, que debiera ser visto no sólo en todas las salas de cine y plataformas digitales, sino también, debiera ser proyectado en todas las escuelas, institutos y universidades no sólo de España sino de todo el mundo, para que la historia silenciada proyecte no sólo la luz de lo que fuimos, sino también nuestras sombras, al tener una importante participación en la ignominia del tráfico con seres humanos. 



La silenciada esclavitud en Sevilla

Aprovechando de que se encuentra cercana nuestra Semana Mayor hemos visitado la sede canónica de la Hermandad de los Negritos en la Capilla de Nuestra Señora de los Ángeles, en la calle Recaredo y el cenotafio del Arzobispo de Sevilla, Don Gonzalo de Mena, en la Catedral de Sevilla. Vamos a recordar una de las páginas más tristes de nuestra historia.

A finales del siglo XV Sevilla se convierte en la mayor metrópolis de España y en uno de los mayores mercados de esclavos en Europa Occidental. La situación de los esclavos era tan penosa que se veían obligados a vivir en la marginalidad de los arrabales.

Don Gonzalo de Mena y Roelas, arzobispo de Sevilla funda en 1393 el Hospital de la Gracia [para personas de raza negra] y una Hermandad para integrarlos en la sociedad de la época, convirtiéndose en la primera congregación religiosa de estas características en el mundo. Será conocida a partir del siglo XVIII como la "Hermandad de los Negritos siendo anteriormente conocida como la Hermandad "de los Morenos". 

Hasta el siglo XIX no podían pertenecer a esta hermandad personas que no fueran de raza negra.


Sarcófago del Arzobispo Don Gonzalo de Mena.  Anónimo [1401]
Capilla de Santiago, en la Catedral de Sevilla. 


Los esclavos de Sevilla pasarán de vivir en los arrabales a integrarse en la hermandad más antigua de Sevilla "Los Negritos" [plasmada fielmente por el prestigioso catedrático de antropología de la Universidad de Sevilla, Isidoro Moreno]. Pero dicha integración estará plagada de dificultades, prohibiciones, suspensiones, hostilidad de la población e intentos de disolución de una parte de las cofradías. 

A partir del siglo XII la Iglesia no sustituye un rey mago blanco por otro negro para universalizar los tres continentes conocidos "Europa, Asia y África".

Los negros esclavos necesitaban hasta la autorización de sus amos para pertenecer a la Hermandad de "Los Negritos" que ha sobrevivido a lo largo de los siglos hasta convertirse en una de las instituciones más antiguas de Europa y la cofradía de barrio más antigua de Sevilla [fundada entre 1393 y 1400], dirigida por blancos sevillanos. 

En 2023 celebrará la Hermandad de los Negritos su 630 aniversario

Un modelo de libertad que se proyectará a las colonias americanas convirtiéndose en uno de los hitos más importantes de la historia negra mundial. La hermandad con entidad jurídica propia será un medio idóneo para que los esclavos pudieran expresarse y organizarse libremente comenzando a poseer cierta identidad colectiva, lo que será visto con ciertas reticencias por sus amos, cuyos intereses durante el siglo XVI serán antagónicos al de los esclavos.



Muy Antigua, Pontificia y Franciscana Hermandad y Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de la Fundación y Nuestra Señora de los Ángeles Coronada. [Hermandad de los Negritos, fundada en el año 1393].



La "S" acompañada de un clavo [esclavo] o DSA [de Sevilla] serán las terribles letras con las que se marcaba en la mejilla de los esclavos con la intención ser identificados.

El documental "Negros" está basado en hechos reales recogidos en las actas de los cabildos de la época. Ha sido de gran ayuda el libro que escribiese el catedrático en Antropología Social y Cultural en Sevilla, Isidoro Moreno, titulado "La antigua Hermandad de los Negros de Sevilla: Etnicidad, poder y sociedad en 600 años de historia", encargado por la citada cofradía del Jueves Santo en 1993, con motivo del VI Centenario de la Hermandad de los Negritos.

La película saca a la luz una parte de la historia silenciada de Sevilla donde existen escasas huellas en los libros de textos españoles sobre la presencia esclava en España durante estos siglos. Durante el siglo XVI Lisboa exportaba esclavos provenientes del Congo, Senegal, Guinea y Angola. Sevilla los recibía exportándolos al resto de Europa Occidental, enriqueciéndose con su mercadeo.

El término “ahorro” proviene del árabe hispánico “hurr” o libre. Ahorrar una parte del dinero para comprar su libertad.


Escena de la película "Negros"


“El hombre libre es la sombra del dios, pero el esclavo es la sombra del hombre libre”

Proverbio babilonio

El Código de Hammurabi [1750 a.C.] no mencionaba castigo alguno hacia quien quitase la vida a su propio esclavo, las leyes en este ámbito se refieren sólo si el propietario del esclavo se ve afectado en sus intereses.

En la antigua Roma se podía perder la libertad por tres razones: las conquistas, la piratería y las guerras civiles. La propia iglesia poseía esclavos en las tierras de los monasterios, amenazando incluso con la excomunión, a quienes incitaran a los esclavos a revelarse contra de sus amos.

Portugal fue pionera en el negocio de los esclavos africanos, desde el siglo XV hasta el XIX. Se considera el año 1441 como el año donde comienza el tráfico de esclavos atlánticos en el ámbito de la expansión ultramarina portuguesa. Los países expansionistas serán los primeros en rentabilizar el negocio de esclavos. Los portugueses ofrecían a los caciques locales caballos, telas, armas de fuego y otras baratijas a cambio de esclavos y oro. La corona portuguesa sería la dueña de una quinta parte de las ganancias de dicho tráfico humano.

Los caciques africanos esclavizaban a las tribus locales más débiles. En otras ocasiones, serán los propios europeos quienes organicen verdaderas cacerías humanas separando familias enteras. Los esclavos serían exportados a las Antillas, Guayanas, Brasil y el sur de los Estados Unidos. Aunque entre el 12 y el 15% de los esclavos morían en la travesía, el trágico negocio de la carne humana era muy rentable para el comercio de los barcos negreros y de los hacendados.

La posesión de esclavos en Portugal, España y más tarde en Norteamérica marcaría un signo de elevado estatus social.

Portugal obtuvo el monopolio del comercio y la exclusividad de navegar hacia el sur, confirmado mediante la bula papal “Aeterni regis”, que fuera otorgada por el papa Sixto IV con fecha de 21 de junio de 1481. Portugal se había adjudicado en el mismo tratado las islas Azores y Madeira, ambos archipiélagos sin nativos. Los esclavos provenientes de África, como mano de obra barata, servirán más adelante para la producción de la caña de azúcar.

El 8 de julio de 1497, el explorador portugués Vasco da Gama zarpa de Lisboa con una flota de cuatro embarcaciones, logrando cruzar el Cabo de Buena Esperanza abriendo una nueva ruta marítima desde Europa occidental hasta Asia, aumentando la zona de influencia portuguesa.


El actor Jimmy Roca comenta la sinopsis de la película "Los Negros"


Algunas posturas sobre la esclavitud

Aristóteles [siglo IV a.C.]

En la época de Aristóteles la esclavitud estaba admitida socialmente concibiendo el modo de vida griego como el ideal para la vida humana. Aristóteles admite la inferioridad femenina y la esclavitud con el convencimiento de que existen esclavos por naturaleza.

Aristóteles defendió la esclavitud en un mundo griego que para desarrollarse tenía que producir opresión y miseria en algunas capas de la sociedad. Y Aristóteles le otorgó carta de naturaleza: existen hombres destinados a una vida superior y otros, a otra inferior. Pensaba que los hombres fuertes “esclavos” eran necesarios para los trabajos y los inútiles para estos menesteres eran útiles para la vida política. Aristóteles permaneció ciego en el asunto de la esclavitud y de la mujer [amparado por la Iglesia posteriormente]. Platón será el filósofo de referencia hasta que Tomás de Aquino en el siglo XIII cristianizó a Aristóteles.

Pablo de Tarso [siglo I] justificaba la esclavitud.

Agustín de Hipona (354-430)

Consideraba que la esclavitud era necesaria para salvar a la Humanidad de sus propios pecados predominando esa filosofía. Será a partir del siglo XIII con Santo Tomás de Aquino, cuando el aristotelismo con su culto a la razón nutrirá al catolicismo durante siglos.

Isidoro de Sevilla (556-636) 

Dios impuso al género humano la pena de esclavitud, a causa del pecado del primer hombre. De modo que a quienes ve que no les es congruente la libertad, les impone misericordiosamente la esclavitud. Y aunque el pecado original haya sido perdonado a todos los fieles por la gracia del bautismo, sin embargo, el justo Dios dispuso la vida de los hombres de modo que hizo a unos siervos, a otros dueños, a fin de que el libertinaje hacia el mal obrar de los siervos quedara restringido por la autoridad de los dueños”.

Santo Tomás de Aquino (1225-1274)

Santo Tomás fue un legitimador de instituciones como la esclavitud o la esterilización forzosa de algunos ciudadanos. Históricamente la Iglesia ha defendido la legitimidad de la esclavitud o los derechos humanos recurriendo en ambos casos a la “Suma Teológica”.


Tumba de Cristóbal Colón. Catedral de Sevilla


Cristóbal Colón (1451-1506)

Durante el tercer viaje, Colón mandó cinco buques cargados de indios para España [a 4.500 maravedíes por cabeza]. La llegada de aquel cargamento viviente enfadó a la reina Isabel que sintió gran compasión y una indignación sin límites.

Fray Bartolomé de las Casas (1484-1566)

El padre dominico Fray Bartolomé de las Casas como describe Antonio de Alcedo: “propuso para liberar a los indígenas de la servidumbre, llevar negros esclavos para el trabajo” [aunque de ello llegara a retractarse].

Refutó las tesis de aquéllos que defendían la superioridad europea frente a los indígenas. De las Casas, condenaba la encomienda que la consideraba una esclavitud. Pasaría cincuenta años de su vida luchando activamente contra la esclavitud, lo que dará lugar a la mejora del estatus legal de la población indígena “Leyes de Indias”.

En 1514 el dominico español y defensor infatigable de los derechos de los indígenas, conmovido por los abusos de los colonos españoles hacia los indígenas [inevitables en toda colonización] renunció a su propia encomienda denunciando vigorosamente la forma de esclavitud encubierta de los indios.

La reina Isabel había dejado en su testamento tratar a los indios como súbditos castellanos, sin maltratarlos ni esclavizarlos, sino cristianizarlos y civilizarlos. Aunque la Corona intentaba proteger a los indios con leyes humanitarias para la época [Cédula de los Reyes Católicos a Nicolás de Ovando, 16 de septiembre de 1501], cuando los documentos llegaban a América, se convertían en papel mojado, continuando los patrones explotando a los indios en las minas y en los campos de cultivo.

Los reyes consintieron la esclavitud de los taínos pero en 1500 la Reina Isabel consideró que esclavizar a los indios era pecado. Tan sólo se esclavizarán a los caribes por ser caníbales y no someterse a la Corona.


A partir de ese momento:

¡Todos los indios serán considerados caribes!, hasta su abolición en 1542.

¡Quién iba a distinguir a un taíno de un indígena caribe en aquella Europa del siglo XV-XVI a 4.500 maravedíes por cabeza en el mercado de esclavos!

Aunque la iniciativa colombina de traer esclavos indios a la península para su venta estaba prohibida, en Centroamérica la esclavitud llegará a convertirse en una actividad económica floreciente.

Los hijos del cacique Guacanagari, que Colón había llevado a la corte de Castilla tras su primer viaje, fueron bautizados como don Juan de Castilla y don Hernando de Aragón, un puesto de la más alta aristocracia.

Según un censo realizado por eclesiásticos en aquella Sevilla de 1765, entre el 7 y el 10% de la población eran esclavos [entre negros, mulatos, turcos y berberiscos]. Los negros, que procedían vía Lisboa y Algarbe, llegaban a Sevilla y los mercaderes realizaban “sus operaciones mercantiles” en las Gradas de la Catedral y en la Plaza de San Francisco, también conocida por los juicios de la Inquisición contra los presuntos herejes, que serían traídos como reos desde castillo de San Jorge en Triana atravesando el puente de barcas, el Arenal y la calle Zaragoza hasta llegar a su triste destino.

El número de negros llegó a ser tan importante en Sevilla que generaba mucha desconfianza por parte de las autoridades y de los eclesiásticos de la época, siendo considerados como un peligro para el orden social. 

La "Cofradía de los Morenos" de la Virgen de los Ángeles será conocida a partir del siglo XVIII como la "Hermandad de los Negritos". 


El actor Kwane Ondo


Mentalidad y visión aristotélica de la esclavitud

Durante la Edad Media y Moderna, la esclavitud llegó a justificarse apelando a la autoridad de Aristóteles que la mencionaba con naturalidad en la organización socioeconómica de las polis griegas de su tiempo. Aristóteles será cristianizado por san Agustín proyectando su pensamiento hacia los indios en América [poligamia, canibalismo, no someterse a la Corona o bárbaros, eran argumentos suficientes].

Con la mentalidad de la época sostenida bajo la influencia aristotélica, las altas instancias del Estado, la aristocracia y la Iglesia verán con normalidad que la sociedad andaluza del siglo XVI tuviera esclavos, considerándolos como bienes. 

Poseer esclavos negros como servidumbre en aquella Sevilla otorgaba un importante signo de distinción social. De la “estrecha relación” de las esclavas negras con sus amos, nacerán los mulatos, que aunque eran considerados ilegítimos, serían bautizados.

Lisboa recibía y exportaba esclavos muchos de los cuales, entraban en España vía Portugal o por el río Guadalquivir. Eran recibidos en el Puerto de las Muelas para ser vendidos en las Gradas de la Catedral de Sevilla y en la Plaza de San Francisco.

Tras la rebelión de las Alpujarras [1568-1571] muchos moriscos serían convertidos en esclavos, que solían estar marcados para que no pudieran escapar. Las hembras embarazadas tenían mejor precio [2 x 1]. Era habitual que tanto clérigos como seglares, tuvieran relaciones sexuales con sus esclavas domésticas, no reconociendo casi nunca a sus hijos ilegítimos.

Miles de barcos negreros con sus bodegas hacinadas de esclavos, procedentes de África habían llegado a los puertos americanos, donde se vendían los esclavos como mano de obra barata, para las plantaciones de algodón en el sur de los Estados Unidos. El precio aumentaba veinte veces, desde África a los puertos de América. Todo el negocio sería financiado por las aseguradoras, grandes hacendados y los grandes bancos.

En el siglo XVI y XVII Holanda creará su propio monopolio comercial a través de la Compañía de las Indias Orientales y de las Indias Occidentales, con mano de obra esclava, que les proporcionaba enormes beneficios [oro, tabaco, azúcar, cacao, café y algodón], desde Nueva Guinea y sus posesiones en Indonesia y Oceanía.

Los esclavos serán considerados por sus amos como bienes muebles. En 1794, la Francia revolucionaria abolió la esclavitud en las colonias pero será de nuevo reintroducida por Napoleón en 1802. Será abolida definitivamente, en 1848.

Inglaterra suspende el tráfico de esclavos el 1807 y la esclavitud el 1833.

«El primer inglés que concibió la idea de apoderarse de africanos para hacerlos trabajar hasta morir en las plantaciones del nuevo mundo, fue John Hawkins [1532-1595], quien ejerció a gran escala  su “gran carrera como negrero”. Tras su “exitosa primera expedición” [1564-1565], la reina de Inglaterra Isabel I [1533-1603] le prestó un barco para una segunda expedición, cuyo nombre para más inri será “Jesús of Lübeck”. Fue nombrado caballero y en su blasón heráldico llegó a colocar la figura de un negro encadenado.

La Guerra de Secesión americana “1861-1865” acabará con la esclavitud. En 1865, la 13ª enmienda de la Constitución decretaba el final de la esclavitud en todo EE.UU.

El 19 de enero de 1880 el Congreso de los Diputados votó la abolición de la esclavitud en Cuba [el último esclavo será liberado en 1886] poniendo así a uno de los hechos más ignominiosos de nuestra historia.

Las gradas de la Catedral de Sevilla nos proyecta aquella Sevilla "morena" que durante siglos presumió de una supremacía espiritual católica, apostólica y mariana, pero al mismo tiempo, permitía y anunciaba el comercio de carne humana llegando a convertir la esclavitud en uno de los pilares fundamentales de su sistema económico y que al final de la vida de los esclavos sus dueños le otorgaban carta de libertad, como señal de buena fe, para nivelar su alma ante Dios...

Incluso Sancho, en el Quijote, propone la idea de importar esclavos africanos a España para luego darse a la buena vidapara el blog de mis culpas...

¿Qué se me da a mí que mis vasallos sean negros? ¿Habrá más que cargar con ellos y traerlos a España, donde los podré vender y adonde me los pagarán de contado, de cuyo dinero podré comprar algún título o algún oficio con que vivir descansado todos los días de mi vida?

Capítulo XXIX de la primera parte del Quijote


Desde la sala de proyección del didáctico documental "Los Negros", para el blog de mis culpas...



P.D. En los planes de estudios del antiguo bachiller, la esclavitud de Sevilla y de España brillaba por su ausencia, tal vez porque ha sido considerada una profunda mancha que se ha intentado borrar intencionadamente de las páginas de nuestra historia. Un trágico periodo histórico que no puede blanquearse ni con la Cal de Morón.


El pasado 12 de mayo a las 20:00 horas tuve la satisfacción de asistir a un pase especial de la película “Los Negros” [en el Multicine Los Arcos de Sevilla]. Tras el documental hubo un extenso coloquio que fue presentado por el alcalde de la Hermandad de los Negros, Felipe Guerra, acompañado de Antonio Palacios [director del documental], Joaquín Asencio [productor] e Isidoro Moreno [durante 50 años profesor de Antropología Social y Cultural en la Universidad de Sevilla y actualmente catedrático emérito jubilado] que contestaron todas las preguntas e inquietudes del público que llenó la sala de cine. 


El emérito antropólogo Isidoro Moreno, contestando a las innumerables preguntas


Al final del acto cultural, Isidoro Moreno tuvo la gentileza de firmarme dos libros suyos: “La Antigua Hermandad de los Negros de Sevilla” [Universidad de Sevilla y la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, 1997] y “La Semana Santa de Sevilla” [Sevilla 2006] que había adquirido hace algún tiempo en la capital hispalense.


Foto Carolina

Este didáctico documental debería de ser visto, además de en todos los cines y plataformas digitales, también en las escuelas, institutos y universidades.

Una grata tarde-noche cultural que no dejó indiferente a ningún asistente a tan interesante documental, de la que podría sacarse no sólo una película sino toda una serie completa por capítulos. Las tres horas que duró tan didáctico acto se me pasaron volando y al final de tan interesante acto cultural, parecía un niño estrenando zapatos nuevos [con mis libros firmados por el emérito profesor].

“La Hermandad de los Negros, una de las primeras asociaciones del mundo que luchó por la libertad de las minorías y la igualdad de las mujeres" ha sido llevada al cine. 

Una mirada retrospectiva de la Hermandad de los Negros que continúa proyectando en la actualidad la Igualdad de derechos, el respeto a las diferencias, entre blancos y negros, hombres y mujeres, jóvenes y mayores, andaluces e inmigrantes. Al no existir casi negros en la hermandad, será la población blanca quien la salve de su posible desaparición durante el último siglo, ofreciendo en la actualidad ayuda a la Asociación de Inmigrantes de Cultura Africana o el ofrecimiento de asesoramiento jurídico a los subsaharianos sin documentación, entre otras causas solidarias.

En definitiva, una profunda defensa contra la discriminación que genera esperanza a quien lo necesite, tan necesaria como en los tiempos de su fundador, don Gonzalo de Mena [hace ya más de seis centurias]. Sin duda alguna, la más antigua de Sevilla.